Las regulaciones de la temporada 2026 de F1 están generando críticas de los pilotos, pero el CEO de la F1, Stefano Domenicali, sugiere que estas quejas podrían ser más tácticas que genuinas.
Por qué es importante:
Las próximas regulaciones de 2026 implican una revisión sin precedentes de las reglas del chasis y la unidad de potencia, marcando la transformación más significativa de una temporada a otra en la historia de la F1. Este nivel de cambio naturalmente genera incertidumbre y posibles cambios competitivos.
El panorama general:
Los pilotos que han probado la nueva tecnología en simuladores han expresado sus reservas:
- Lance Stroll afirmó que no era “fanático de la dirección” de las regulaciones.
- Charles Leclerc encontró el coche “no el más agradable” en las pruebas de simulador.
- Fernando Alonso señaló “menos rendimiento que este año” después de las pruebas iniciales.
- Incluso el cuatro veces campeón del mundo Sebastian Vettel ha expresado su preocupación por el impacto de los coches más pesados en el rendimiento.
Sin embargo, Stefano Domenicali, en el podcast The Race F1, desestimó estas críticas como mayormente estratégicas.
La perspectiva de Domenicali:
Domenicali ve las quejas a través de dos lentes:
- Juego táctico: Él cree que muchos equipos y pilotos están haciendo comentarios con una agenda oculta, usándolos como una herramienta estratégica.
- Ruta evolutiva: También reconoce que las regulaciones aún están evolucionando. Las discusiones con la FIA, los equipos y los pilotos ya han llevado a cambios significativos desde los conceptos iniciales.
Señaló que las preocupaciones iniciales sobre el “lift and cost” (levantar el pie del acelerador para ahorrar combustible, comprometiendo la velocidad) ahora están “casi desvaneciéndose” a medida que las regulaciones maduran.
Qué sigue:
Aunque los pilotos admiten que las regulaciones están en sus primeras etapas, la declaración “táctica” de Domenicali resalta la naturaleza altamente política de la Fórmula 1. Los equipos pueden usar declaraciones públicas para desviar la atención de sus rivales o para presionar sutilmente por cambios que se alineen con sus propias fortalezas a medida que comienza a definirse el orden jerárquico de 2026. El verdadero impacto de las regulaciones solo se hará evidente una vez que los coches salgan a la pista y el desarrollo se intensifique.