Red Bull está experimentando uno de sus comienzos de temporada de F1 más difíciles, actualmente cuarto en el campeonato de constructores. Esto marca un alejamiento significativo de su era de dominio, señalando el fin de su reciente supremacía.
Por qué es importante
El equipo de Milton Keynes va camino de su peor resultado desde 2015. Aunque Max Verstappen sigue ofreciendo actuaciones excepcionales, la consistencia general del equipo ha caído en picada, especialmente en el segundo coche.
El panorama general
Una estadística contundente ilustra el alarmante declive de Red Bull:
- Después de 14 carreras, Red Bull solo ha logrado que ambos coches puntúen en tres ocasiones.
- Esto contrasta fuertemente con 10 finales con doble puntuación en la misma etapa del año pasado.
Los detalles
El núcleo de la lucha de Red Bull radica en la significativa brecha de rendimiento entre sus dos pilotos:
- Max Verstappen ha puntuado en 13 de 14 Grandes Premios esta temporada, a menudo superando el coche.
- Yuki Tsunoda solo ha terminado entre los diez primeros tres veces (Baréin, Miami e Imola).
- En la única carrera donde Verstappen no puntuó (Gran Premio de Austria), Tsunoda también terminó fuera del top 10, lo que subraya la vulnerabilidad del equipo.
En números
La falta de consistencia de Red Bull en dobles puntuaciones, comparada con sus rivales:
- McLaren: 13
- Ferrari: 11
- Mercedes: 7
- Williams: 5
- Red Bull: 3
- Aston Martin y Haas: 2
- Stake y Racing Bulls: 1
Esto coloca a Red Bull detrás de líderes y equipos de mitad de tabla, revelando un doloroso cambio de contendiente principal a equipo en dificultades.
Qué sigue
Red Bull se enfrenta al desafío de abordar la disparidad de rendimiento y mejorar la consistencia del RB21 en ambos coches. Recuperar el dominio depende de cerrar esta brecha y asegurar que ambos pilotos contribuyan regularmente a los puntos.