El director del equipo Red Bull, Laurent Mekies, ha descartado la posibilidad de utilizar componentes de Racing Bulls para solucionar los problemas actuales del RB21, citando diferencias fundamentales en el diseño del coche y las regulaciones de la F1.
Por qué es importante
El RB21 ha demostrado ser un coche difícil de manejar esta temporada. Aunque Max Verstappen ha logrado extraer rendimiento, a menudo ha expresado su preocupación por sus limitaciones. Yuki Tsunoda, quien reemplazó a Liam Lawson, ha tenido dificultades constantes para posicionar el coche más arriba en la parrilla.
Por el contrario, el coche de Racing Bulls es conocido por ser mucho más fácil de conducir, lo que llevó a especulaciones sobre una posible transferencia de piezas.
Los detalles
Mekies confirmó a Sky F1 que una transferencia de componentes no es factible, afirmando: "La génesis del coche... el origen de los coches es demasiado diferente como para que cualquiera pueda transferir algo de un coche a otro."
- Operaciones independientes: Las regulaciones de la F1 exigen que los equipos operen de forma independiente, lo que significa que los componentes críticos deben diseñarse y fabricarse sin influencia directa de equipos rivales. Aunque se pueden comprar algunas piezas, las diferencias arquitectónicas fundamentales impiden un intercambio de elementos principales.
- Demasiado tarde en la temporada: Mekies también destacó que es demasiado tarde en la temporada para un enfoque tan radical, ya que los equipos están comprometidos con sus propias trayectorias de desarrollo basadas en las decisiones de diseño iniciales.
Qué sigue
Red Bull seguirá desarrollando el RB21 basándose en su concepto inicial y en los datos continuos. El enfoque sigue siendo optimizar su paquete existente en lugar de intentar una integración de componentes entre equipos.