Las regulaciones de la unidad de potencia de la Fórmula 1 para 2026 siguen siendo un punto de discordia significativo entre bastidores. El presidente de Honda Racing Company, Koji Watanabe, ha declarado que el asunto está lejos de resolverse, con desacuerdos continuos entre los fabricantes y la FIA.
Por qué es importante:
Se rumorea que Mercedes ha avanzado significativamente con las nuevas regulaciones, lo que podría darles una ventaja competitiva temprana. Mientras tanto, otros fabricantes luchan con la fuerte dependencia de la energía eléctrica, una división de potencia 50-50 entre el componente eléctrico y el motor de combustión interna. Este desequilibrio podría afectar la competitividad, los costos y la fiabilidad de toda la parrilla.
En detalle:
El presidente de Honda, Koji Watanabe, confirmó a as-web.jp que las conversaciones entre los proveedores de unidades de potencia han llegado a un punto muerto. Las reuniones durante el fin de semana del Gran Premio de Baréin, que incluyeron a Honda, Red Bull, Ferrari, Audi, General Motors y Mercedes, buscaron discutir posibles ajustes a las reglas, especialmente en relación con el papel mejorado del MGU-K. Sin embargo, no se llegó a ningún acuerdo entonces, ni se ha logrado desde entonces.
- Honda, que se asociará con Aston Martin en 2026, ha expresado repetidamente sus preocupaciones sobre la visión de la FIA.
- Se prevé que el despliegue eléctrico se duplique en comparación con los niveles actuales, lo que convierte la recuperación de energía y la capacidad de la batería en obstáculos críticos y difíciles de superar.
Qué sigue:
Watanabe cree que estas discusiones no han terminado y que inevitablemente se reanudarán. "Mientras los ideales que actualmente mantiene la Federación Internacional del Automóvil (FIA) permanezcan inalterados, espero que las discusiones comiencen de nuevo", afirmó. La FIA sigue defendiendo su revisión integral de las regulaciones a pesar de las críticas de pilotos y fabricantes. Con menos de siete meses para que los nuevos coches salgan a la pista, la pregunta crítica sigue siendo: ¿se podrá alcanzar un consenso, o la supuesta ventaja de Mercedes pondrá a sus rivales en desventaja desde el inicio de la nueva era?