Mercedes volverá a la especificación de suspensión anterior a Imola para el Gran Premio de Hungría, con el fin de aumentar la confianza de Kimi Antonelli y George Russell en medio de una preocupante caída de rendimiento.
Por qué es importante
Mercedes ha experimentado una notable disminución en su rendimiento durante la fase europea de la temporada. Kimi Antonelli, en particular, ha tenido dificultades para sumar puntos, lo que ha afectado visiblemente su confianza. George Russell tampoco ha logrado subir al podio en Europa después de un sólido comienzo de año, generando preocupación dentro del equipo de Brackley.
El panorama general
Los problemas de rendimiento del equipo se han atribuido, en parte, a la suspensión introducida antes del Gran Premio de Emilia Romaña. La única excepción fue el Gran Premio de Canadá, donde Russell ganó y Antonelli consiguió su primer podio en la F1, lo que Andrew Shovlin describió como un "hecho inconveniente" que complicó su diagnóstico.
Los detalles
Andrew Shovlin, director de ingeniería de pista de Mercedes, confirmó que volver a la suspensión antigua siempre fue una posibilidad, a pesar del éxito en Canadá.
- Comentarios de los pilotos: Los pilotos informaron una falta de estabilidad en la entrada de las curvas y una pérdida general de confianza en el W16, especialmente en circuitos de alta velocidad como Red Bull Ring, Silverstone y Spa-Francorchamps.
- Diagnóstico retrasado: Shovlin señaló que una serie de carreras en mojado dificultó su capacidad para concluir rápidamente que la suspensión era la causa principal de los problemas.
Qué sigue
La decisión de revertir la suspensión en Hungaroring se considera el siguiente paso "lógico" para ayudar a restaurar el W16 a una configuración que Antonelli y Russell encuentren más cómoda y estable, con el objetivo de recuperar su rendimiento y confianza.