Por qué importa:
Han surgido preocupaciones sobre la velocidad de la próxima generación de coches de F1, con especulaciones de que podrían ser tan lentos como los de F2. La FIA confirma una reducción inicial de la velocidad, pero asegura que es una fase temporal, anticipando un rápido desarrollo.
El panorama general:
El director de monoplazas de la FIA, Nikolas Tombazis, declaró que los coches de F1 de 2026 se proyecta que serán inicialmente entre uno y dos segundos y medio más lentos por vuelta. Expresó sorpresa por el enfoque del público en los tiempos de vuelta, señalando que las reducciones históricas de velocidad no han perjudicado el deporte y que las diferencias de 1.5 segundos dentro de la parrilla son comunes y apenas perceptibles para los espectadores.
Cambios clave para 2026:
Las próximas regulaciones traen importantes revisiones tanto en el chasis como en el diseño de la unidad de potencia:
- Aerodinámica Activa: El efecto suelo y el DRS serán reemplazados por alerones delanteros y traseros activos, con configuraciones para rectas y curvas.
- Reducción de Carga Aerodinámica y Resistencia: Esta reducción intencional busca crear mejores carreras, haciendo que los coches más pequeños y ligeros sean naturalmente más lentos al principio.
- División de Unidad de Potencia: La contribución de la energía eléctrica aumentará del 15% a un reparto 50/50 con el motor de combustión interna (ICE).
La preocupación por el 'clipping':
Una de las mayores preocupaciones gira en torno al 'clipping', donde la energía eléctrica alcanza su despliegue máximo demasiado pronto en las rectas, reduciendo la velocidad máxima. Se espera que este problema sea más pronunciado con la nueva división eléctrica 50/50 y la reducción de potencia del ICE.
Qué sigue:
A pesar de las proyecciones iniciales, Tombazis es optimista. Aseguró que los equipos desarrollarán rápidamente los coches, mitigando la pérdida inicial de velocidad. Desestimó firmemente las afirmaciones de que los coches de F1 bajarán a niveles de F2, que suelen ser entre 10 y 15 segundos más lentos. Tombazis reconoció que algunos equipos podrían estar inicialmente en desventaja ya que no todos los datos sobre la carga aerodinámica esperada están disponibles.