
¿Los problemas de Alpine se remontan a errores de Renault de hace una década?
Doce meses después de un sorprendente doble podio en Brasil, Alpine se enfrenta a una dura realidad: no hay esperanzas similares para el próximo Gran Premio de São Paulo. El equipo se sitúa en la cola del Campeonato de Constructores, una posición que Flavio Briatore, asesor ejecutivo y jefe de facto, califica de "tortura". Admite francamente que la paralización total del desarrollo del coche de 2025 pudo haber sido demasiado drástica, pero argumenta que los verdaderos problemas provienen de decisiones tomadas hace una década, antes de la re-adquisición del equipo por parte de Renault y el amanecer de la era híbrida.
Por qué importa:
La actual situación de Alpine pone de relieve las repercusiones a largo plazo de los deslices estratégicos en la Fórmula 1. La decisión de sacrificar la temporada 2025 para centrarse en el proyecto de 2026, junto con el cambio a unidades de potencia Mercedes, representa una apuesta de alto riesgo. Si tiene éxito, podría significar un cambio radical para el equipo de Enstone; si no, subraya la dificultad de recuperarse de errores fundamentales en un deporte hipercompetitivo.
Los detalles:
- Parón de desarrollo: Alpine cesó deliberadamente el desarrollo de su coche de 2025 a principios de año para canalizar todos sus recursos hacia el proyecto de 2026, buscando una ventaja significativa con las nuevas regulaciones y su transición a equipo cliente de Mercedes.
- Briatore defiende este "riesgo" argumentando que Alpine carecía de la capacidad para ejecutar programas de desarrollo paralelos para los coches de 2025 y 2026. Creía que mejorar el A525 solo permitiría alcanzar, en el mejor de los casos, el 8º o 9º puesto en constructores.
- Inestabilidad directiva: Briatore señaló la gestión inconsistente durante años, a menudo dirigida desde París en lugar de desde Enstone de forma práctica, como un factor crítico que socava el rendimiento del equipo.
- Déficit de motor: El principal problema a largo plazo identificado es el fracaso de Renault en invertir adecuadamente en su proyecto de unidad de potencia turbo-híbrida desde principios de la década de 2010, bajo el entonces CEO Carlos Ghosn. Mientras rivales como Mercedes, Honda y Ferrari destinaban recursos a las nuevas reglas híbridas desde 2014, la inversión de Renault fue insuficiente.
- Briatore aclara que la culpa no recae en el personal actual de Viry-Châtillon, que cree hizo lo mejor posible con recursos limitados, sino en la infrainversión estratégica a nivel corporativo hace una década.
- Cambio a motor Mercedes: La pragmática decisión de abandonar el proyecto de unidad de potencia de F1 de Renault y convertirse en cliente de Mercedes para 2026 se basó en el reconocimiento de que la competitividad requiere los mejores componentes, independientemente del fabricante.
¿Qué sigue?:
Briatore expresa un optimismo cauto para 2026 con el motor Mercedes, sin predecir un shock de campeonato al estilo Brawn, sino apuntando a alcanzar posiciones consistentes entre los seis primeros.
- Cree que estar constantemente entre los seis o siete primeros permitirá al equipo "oler el podio" con más frecuencia.
- Esta aspiración, aunque ambiciosa dada la posición actual de Alpine, es característica de Briatore, quien tiene un historial de demostrar que los escépticos se equivocan, notablemente con el éxito de Benetton contra equipos establecidos.
- La próxima temporada y los cambios de regulación de 2026 serán una prueba importante para determinar si la calculada apuesta de Alpine por el desarrollo temprano y un nuevo proveedor de unidades de potencia dará sus frutos y los sacará de su actual "tortura".
Artículo original :https://www.the-race.com/formula-1/mistakes-renault-made-10-years-ago-have-doome...






